El quinto chakra contiene las dificultades de rendir la voluntad y el espíritu a la voluntad de Dios. Desde el punto de vista espiritual, el objetivo supremo es la entrega total de nuestra voluntad personal en las «manos de lo Divino». Jesús y Buda, así como otros grandes maestros, representan el dominio de este estado de conciencia, la unión completa con la voluntad divina.
Ubicación:La garganta.
Conexión energética con el cuerpo físico:Garganta, tiroides, tráquea, esófago, paratiroides, hipotálamo, vértebras cervicales, boca, mandíbulas y dientes.
Conexión energética con el cuerpo emocional/mental:El quinto chakra se hace eco de los numerosos problemas emocionales y mentales que se presentan durante el aprendizaje de la naturaleza del poder de elección. Todas las enfermedades están relacionadas con el quinto chakra, porque la elección interviene en todos los detalles de la vida y, por lo tanto, en todas las enfermedades.
Conexión simbólica/perceptiva:El desafío simbólico del quinto chakra es progresar mediante la maduración de la voluntad, comenzando por la percepción tribal de que todo y todos los que lo rodean tienen autoridad sobre uno, pasando por la percepción de que sólo uno tiene esa autoridad, hasta la percepción final de que la verdadera autoridad proviene de alinearse con la voluntad de Dios.
Miedos principales:Los miedos relacionados con el poder de voluntad existen en todos los chakras. Tememos no tener autoridad o poder de elección en la vida, primero dentro de la tribu, y después en nuestras relaciones personales y profesionales. Además tememos no tener autoridad sobre nosotros mismos, perder el control en lo que se refiere a nuestras reacciones ante sustancias, el dinero, el poder, el dominio emocional de otra persona sobre nuestro bienestar. Y finalmente tememos la voluntad de Dios. La idea de entregar su poder de elección a una fuerza divina sigue siendo la mayor dificultad para la persona que desea hacerse consciente.
Fuerzas principales:Fe, conocimiento propio y autoridad personal; capacidad de tomar decisiones sabiendo que, sea cual fuere la decisión que tomemos, somos capaces de atenernos a nuestra palabra, con nosotros mismos y con los demás.
Conexión sefirot/sacramento:El quinto chakra se corresponde con las sefirot de Jesod, que representa el amor o la clemencia de Dios, y de Gueburá, que representa el juicio de Dios. Estas dos sefirot son los brazos derecho e izquierdo de Dios, que describen la naturaleza equilibrada de la voluntad divina. El sentido de estas sefirot es que lo Divino es clemente y que sólo Dios tiene derecho a juzgar las elecciones que hacemos. La sefirá de Jesod nos recuerda que debemos emplear palabras amables para comunicarnos con los demás, y la sefirá de Gueburá, que debemos hablar con respeto e integridad. El sacramento de la confesión se corresponde con el quinto chakra, y simboliza el hecho de que todos somos responsables de la forma en que utilizamos nuestro poder de voluntad. Mediante el sacramento de la confesión se nos ofrece la oportunidad de rescatar a nuestro espíritu de las «misiones negativas» a que lo hemos enviado como consecuencia de nuestros pensamientos o actos negativos.
Verdad sagrada:El quinto chakra es el centro de las elecciones y sus consecuencias, del karma espiritual. Cada elección que hacemos, cada pensamiento y sentimiento que tenemos, es un acto de poder que tiene consecuencias biológicas, medioambientales, sociales, personales y mundiales. Estamos donde están nuestros pensamientos, y así, en nuestra responsabilidad están incluidas nuestras aportaciones energéticas.
¿Qué elecciones haríamos si pudiéramos ver sus consecuencias energéticas? Sólo podemos acercarnos a este tipo de previsión ateniéndonos a la verdad sagrada Entregatu voluntad a la voluntad divina.Las lecciones espirituales contenidas en el quinto chakra nos enseñan que los actos motivados por una voluntad personal que confía en la autoridad divina producen los mejores efectos.
Nuestros pensamientos y actitudes también se benefician de aceptar la orientación superior. Una mujer que tuvo una experiencia de casi muerte piensa que cada elección que hace tiene un efecto energético en la totalidad de la vida, porque cuando se encontraba en ese estado intermedio entre la vida y la no vida física vio todas las decisiones que había tomado en su vida y las consecuencias que habían tenido sus actos en ella misma, en otras personas y en la vida en general. Se le reveló que esa orientación estaba constantemente tratando de penetrar su conciencia. Ya eligiera comprarse un vestido o ir al médico para hacerse un reconocimiento, ninguna de sus decisiones era tan insignificante como para que lo Divino la pasara por alto. En el caso de la compra de un vestido, por ejemplo, vio las consecuencias energéticas inmediatas de esa «venta» en la larga cadena de personas que habían participado en su creación y distribución. Ahora pide orientación antes de tomar cualquier decisión que deba tomar. Comprender las consecuencias energéticas de nuestros pensamientos, creencias y actos podría obligarnos a tener un nuevo grado de sinceridad. Nos sería imposible mentir, ya sea a nosotros mismos o a otras personas. La curación auténtica y completa exige ser sincero con uno mismo. La incapacidad de ser sinceros obstaculiza la curación tan seriamente como la incapacidad de perdonar. La sinceridad y el perdón rescatan nuestra energía, o espíritu, de la dimensión energética «del pasado». Nuestro quinto chakra y sus lecciones espirituales nos enseñan que el poder personal está en nuestros pensamientos y actitudes.