Contempla Mis maravillas manifestándose

El tiempo significa cada vez menos y menos. Es di­fícil creer que la estación está cambiando, que el ve­rano ha pasado, que tanto ha sucedido en tan corto tiempo y, sin embargo, no es sino el comienzo de al­go poderoso que se acelera, poderosos cambios, no sólo para los individuos sino para toda esta Tierra.

Aprende a distenderte. Recuerda esto en los días que están por venir, porque es importante. No tengas pla­nes o modelos fijos. Sé flexible. Por momentos, afló­jate completamente y distiéndete.

Reflexiona sobre este año pasado. Observa clara­mente los errores que has cometido y ve cómo pue­des rectificarlos. Aprende a compartir el trabajo. Nunca sientas que deberías hacer algo porque tú lo puedes cumplir más rápidamente. Está bien que otros agreguen sus vibraciones, para que se sientan parte del todo, acepten sus responsabilidades y crez­can en el proceso. Nunca seas posesivo, aun en el tra­bajo; comparte todo. Todo debe hacerse con amor por Mí y por cada uno de vosotros.

Hay lecciones importantes que aprender y debes hacerlo sin demora. Nunca te demores en errores pa­sados. Míralos claramente por lo que son y haz algo acerca de ellos, ahora.

Contempla Mis maravillas manifestándose.