Deja todo en Mis manos

Te digo a ti y os digo a todos: sed muy pacientes, perseverantes y persistentes, porque sólo de esta for­ma se puede alcanzar la meta.

Mirad dentro de vuestros corazones, buscad con diligencia y se os mostrará cuál es la meta para vosotros.

Cuando tus ojos se hayan abierto, avanza lenta pe­ro constantemente y no permitas que nada se inter­ponga en tu camino. Encontrarás que muchas cosas intentarán detenerte. Aquí es donde la persistencia es tan necesaria. Nunca vaciles.

Debes saber adónde vas, si no, te encontrarás com­pletamente perdido. Habrá muchas cosas que te tentarán a salir del camino; que aun te empujarán fuera de él si no estás realmente fuerte y firme. Arra­sa con las dificultades porque estás decidido a llegar allí a donde debes.

Mantente cerca de Mí. Nunca trates de hacer por tu cuenta lo que tienes que hacer. No permitas que tu corazón se deprima, porque todo está muy bien.

Deja todo en Mis manos. Sigue en Mis pasos.