Quédate tranquilo y siente dentro de ti el ritmo de la vida y síguelo. Resuelve si deseas seguir las leyes hechas por los hombres o hacer Mi voluntad cueste lo que cueste. La elección está en tus manos. Eres libre para elegir y nadie más puede hacer la opción por ti. Con frecuencia, el mundo te condenará cuando elijas Mi camino, pero con Mis bendiciones puedes enfrentar lo que ha de venir, sin vacilar, y sabe que cuando haces Mi voluntad sólo lo perfecto puede ser el resultado final.