He dotado a cada alma con Mis dones, dones del Espíritu. Depende por completo de cada individuo el cómo sean aceptados y usados. Recuerda siempre: no me engañarás, y si usas mal esos dones, te serán quitados. Cuando se usan bajo Mi guía, pueden ser una gran ayuda para muchas, muchas almas. Esto significa que los dones del Espíritu nunca deben ser tomados para uno mismo o para la propia glorificación, que no es necesario el reconocimiento personal.
Lo que es del Espíritu es Mío, así como el honor y la gloria. Aquellos que son usados para atraerlos no son sino instrumentos y como tales deben permanecer.
Mantente siempre sencillamente como un niño. Déjame usarte más y más de acuerdo con Mi voluntad, sin reservas ni restricciones. No rehuses nada: da todo y recibe todo. Es así de simple. Mantenlo así. Deja que todas las puertas se abran de par en par. Elévate a los más altos reinos, con el gozo más puro. No escondas nada. Deja que brille la luz de la Verdad. No hay nada que esconder cuando caminas Conmigo de la mano.
Sabe que la oscuridad no puede soportar la luz de la Verdad. No hay lugar para la oscuridad cuando la Luz resplandece.
Otra vez le digo a cada uno de vosotros: "Encuentra tu camino verdadero y camina por él con serenidad y confianza".
Dejad que Mi Paz y Mi Amor os penetre y envuelva y que vuestras vidas se llenen de alabanza y agradecimiento.