No veas limitaciones

Expándete, Hijo Mío, en todas las direcciones. Deja que tu corazón y tu conciencia se amplíen y no veas limitaciones. Permanentemente hay lecciones impor­tantes que aprender, serenamente y sin obstáculos. Que estés allí cuando te necesiten; fúndete rápida­mente en el medio ambiente, cuando la necesidad haya sido satisfecha. Sal de tu rutina, sal de tu ruta siempre transitada y muévete todo el tiempo hacia lo Nuevo. Vive enteramente en el espíritu. Mi Paz te doy. Acéptala. Nunca la dejes de lado. Permite que te penetre, que te rodee. Irrádiala. Cuanto más agitada sea la vida, mayor será la necesidad de esa estabili­dad y paz interior.

Observa ese claro y sereno lago dentro de ti. Sólo cuando está como un espejo puedes reflejar Mi Amor y Mi Luz, sin defecto.