Vive Mi palabra

Un niño pequeño puede estar sentado en un cuarto caótico, con desavenencias a su alrededor, sin embargo, si está jugando con un juguete pre­cioso o abstraído en un juego, puede estar feliz­mente inconsciente de cualquier cosa discordante. El está concentrado en eso. Así es contigo. Hijo Mío. Cuando hay discordia y confusión a tu alrededor, mantén tu corazón y tu mente en Mí. Vuélvete a tu interior y encuentra esa paz y serenidad que nada puede tocar o perturbar. Sentirás más y más la ne­cesidad de volverte a ese centro interior. Cuando entras en un cuarto donde obviamente hay discor­dia, no te permitas formar parte de ella. Elévate sobre ella y hazte más consciente de Mí, de que

YO SOY allí dentro de ti, de que YO SOY paz, amor y armonía, de que YO SOY verdad y com­prensión.

Pon en práctica este consejo en todas las ocasiones. Te serán dadas muchas oportunidades; por lo tanto, no lo olvides. Tienes algo constructivo para contri­buir, nunca dudes en llevarlo a la práctica. Las pala­bras sin acción no son nada.

Vive Mi palabra.