Afortunadamente para ti, tienes esa coraza de rinoceronte de dos pulgadas de espesor, porque con tu cargante actitud de malditos-Ios torpedos, ocasionalmente te alcanzará alguno que otro torpedo. No te preocupes. Eres un rinoceronte. Tu cuero es tan grueso que casi no los sientes. Quizás de vez en cuando te quiten un poco la respiración, pero rápidamente estás de pie cargando nuevamente y imás bravo que el diablo!
"Sí señor, eres un rinoceronte y puedes aguantar la adversidad. Casi te deleitas en soportar los puñetazos pues sabes que eso te fortalece más aún. Cuanto más crezcas como rinoceronte mayores serán los torpedos que te disparen. Eso está muy bien. Eres un gran rinoceronte de dura piel, feroz y de fuerte carga y los torpedos se agotarán antes de que pienses siquiera en volver a ser una vieja vaca perezosa en el pastaje. ¡Sigue embistiendo!