Los rinocerontes sienten particular agrado por la vida. Les encanta de tal manera la vida que raramente se verá a un rinoceronte con problemas de alcohol o de drogas. Ellos no necesitan estimulantes artificiales puesto que producen sus propios estimulantes naturalmente.
Esto es un hecho científico y los bioquímicos han descubierto recientemente la existencia de unas materias llamadas endorfinas que son sustancias de naturaleza morfínica producidas por el cerebro. El antropólogo Leonel Tiger nos dice que estos narcóticos naturales disminuyen el dolor y aparentemente expanden nuestras sensaciones de placer. Los científicos han descubierto que el ejercicio del trote parece que provoca la secreción de las endorfinas y eso explicaría por qué un rinoceronte a la carga se siente tan feliz en la vida. Sus cerebros literalmente están inundados de anti-depresivos.
Sigue, pues, creyendo. Sigue a la carga. Imagínate alcanzando tus metas. ¡ Tú sabes que lo puedes lograr puesto que eres un rinoceronte! Tu entusiasmo te mantendrá a la carga. ¡Carga! ¡Carga! ¡Carga!
Si en algún momento parece que tus baterías se han descargado, ya sabes qué fue lo que sucedió. Tu fe se ha debilitado. Sigue creyendo en ti mismo. Lo tienes que hacer. Nadie hará eso por ti. Tiene que surgir desde dentro de ti mismo. ¡Ten fe y tendrás Éxito!