Sé feliz en tu trabajo. ¿Alguna vez has entrado a un edificio de una entidad pública y te has fijado en los empleados? Son los muertos vivientes. Ayer fui al centro de la ciudad para tramitar unos papeles oficiales y casi no puedo creer lo que vi de las vacas en las ventanillas. Todas actuaban como si tuvieran un puñal clavado en la espalda. Hablaban monótonamente sin mostrar emoción alguna. Era congelante. Pensé que me había adentrado en la zona crepuscular.
Se rinoceronte y muestra tu personalidad. Sonríe y actúa como si estuvieses vivo. Pon agilidad en tu andar y calor en tus saludos. Pon algún sentimiento en tus palabras y muéstrate ansioso de ayudar. No sólo te vas a gustar más a ti mismo, sino que crearás alrededor tuyo un ambiente de trabajo más cálido y amistoso y todos te van a querer más, especialmente el jefe.
Si quieres sacarle más a tu empleo, preséntate mañana como. un rinoceronte de tiempo completo. No te importen los rumores de que has estado bebiendo o que te caíste de cabeza de la cama. Recuerda tu cuero de dos pulgadas de espesor y tu audacia. Las vacas detestan trabajar con los rinocerontes porque se ven mal junto a ellos. Las vacas son perezosas e improductivas. Tratarán de hacerte bajar al nivel de ellas. No te dejes. ¡Hay un rinoceronte suelto aquí! ¡Cuidado! ¡ ¡Nadie sabe qué puede suceder!! Un sólo rinoceronte en realidad puede despertar cualquier lugar. Decídete a ser ese rinoceronte y fíjate cómo van a comenzar a sucederte cosas.