Libertad o muerte en una decisión

El valor de toda decisión depende del coraje que se necesite para ejecutarla. Las grandes decisiones, aquellas que constituyeron los fundamentos de la civilización, fueron tomadas asumiendo grandes riesgos, lo que a menudo significó la posibilidad de encontrar la muerte.

La decisión de Lincoln de promulgar su famosa Declaración de la Emancipación, mediante la que se otorgaba la libertad a las personas de color en Estados Unidos, la tomó a sabiendas de que ese acto pondría en su contra a miles de amigos y partidarios políticos.

La decisión de Sócrates de tomar la venenosa cicuta, en lugar de comprometer sus creencias personales, fue un acto de gran valentía. Se adelantó mil años a su tiempo, y dio el derecho a la libertad de pensamiento y de palabra a todos los que no habían nacido aún.

La decisión del general Robert E. Lee de apartarse de la Unión y tomar partido por la causa del Sur, también fue una acción valerosa, pues él sabía que podía costarle la vida, además de la de muchas otras personas.