Empujar una calabaza significa hacerlo con la mano. Cuando se arroja una calabaza al agua y se presiona hacia abajo, de repente salta hacia un lado. Pase lo que pase, es algo que no se detendrá en un solo lugar.
La mente del hombre que ha llegado no se detiene en nada ni por un momento. Es como empujar la calabaza en el agua.