No dejes que nada te sorprenda. Dicen los estoicos: no esperes solo a que pueda llover en cualquier momento. Espera también que te traicionen, que te decepcionen, que haya personas malas, ladrones, humillaciones, codicia, maldad, envidia, crueldad... ¡Uno deja de estar tan enfadado cuando se reconcilia con el hecho de que la vida es muy difícil! La persona sabia, afirman los estoicos, es aquella que consigue que nada le haga perder su tranquilidad de espíritu, su paz mental y emocional. La humanidad, dice Séneca, se fortalece cuando se enfrenta a retos, aunque sean imaginarios. «Hay más cosas que nos asustan que cosas que pueden realmente acabar con nosotros. Sufrimos más con la imaginación que en la realidad.»
Si te enfrentas a algo concreto que te agobia, puedes hacer un pre-mortem. ¿Qué es? Sencillamente, pregúntate: « ¿Qué es lo peor que me puede pasar?». Así estarás preparado. Daniel Coyle, periodista y escritor, explica que esa es una de las estrategias que usan hoy día las fuerzas especiales norteamericanas cuando se preparan para misiones peligrosas: «Se pasan toda una mañana repasando cada error o desastre que podría ocurrir durante la misión. Examinan cada posible error sin piedad y lo relacionan con una reacción apropiada: “Si el helicóptero se estrella en el suelo, haremos X. Si nos recogen en el lugar equivocado, haremos Y. Si nos superan en número, haremos Z”».