Uno de los mayores exponentes del estoicismo es el compasivo y generoso emperador romano Marco Aurelio. Tuvo que pasar buena parte de su vida duramente, luchando contra las hordas germanas. Para ayudarse a sí mismo a superar tantas dificultades, en la última década de su vida, en la soledad de su tienda de campaña, Marco Aurelio escribió un diario. Este diario no estaba escrito para ser publicado, pero ha llegado hasta nosotros y es uno de los textos más influyentes de los últimos siglos.
Los estoicos no creían en darse falsos ánimos y mantener la esperanza de que las cosas mejorarían frente a la adversidad. Sí creían, en cambio, en nuestra capacidad para comprender la propia naturaleza humana y gestionar nuestras emociones, sin depender de las circunstancias externas. ¿Cómo podemos lograr esto? Marco Aurelio nos dice: «Eres más fuerte de lo que crees. Claro que las cosas pueden torcerse, pero tú puedes superarlas».